No busques en sus ojos
alguna lágrima oblicua
Ni lo hagas en su letra
de sangre y acuarela
Descuelga sí su nombre
de la alta estantería
infinita que relata
el espanto del mundo
atrapado y absorto
Su cabeza vio el horror
a los ojos cara a cara
y observó la finitud
como un medroso espectro
Testigos serios han dicho
tanto de todos ellos
¡y qué bien escribían!
Yo en cambio sé que tan solo
sucumbían sobre las hojas
tenebrosos de hastío
Serie: "Literaturas"
MG, Resistencia abril del 2011
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