Que se te desencaje la mandíbula
y que así fluya el aire en cantidades,
que es la risa conciencia de ésta fábula
y el único saber de las verdades.
Deja a tus dientes salir a la vida
que se arrugue por entero tu cara,
que es el cuerpo que bien goza en su fluida
pena ignota que un día lo encontrara.
Que trepide el diafragma del espíritu
repleto de alegría que desborda,
que no hay ninguna otra forma que el espíritu
sienta la vida toda y que la absorba.
Y que el cuerpo palpite de emoción
trémulo regocijo sin igual,
que la risotada sea al fin la razón
del estertor en el tiempo final
Y que fluya la risa como un río,
ríetelo todo, que no es moda reír
de todos modos, hay más pena que brío
y es mucho más fácil matar que parir.
Que tiemble la tierra de tanta risa
que los árboles están que lloran de pena
y necesitan de viento y de brisa,
¡es la risotada una pena tan buena!
Sí, que se te desencaje la mandíbula
y que así fluya el aire en cantidades,
que es la risa conciencia de ésta fábula
y el único saber de falsedades.
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