Que la pluma regrese al vuelo
o que el agua a la cascada
que el haz de luz regrese al
astro
amarillo y tenaz de la mañana
que el rumbo de la flecha
retroceda sobre su estela
al corazón del arco
y
del arco al
árbol
que todavía observo en mi
ventana
y el huerto que se vuelva
piedra
y
la piedra vuelva a su magma
que retroceda el agua
que retroceda
del camino con peces de bajada
y así que vuelva la tinta
camino de regreso
gota a gota sobre el papel
de éste tan insensato verso
que por fin la luna caiga
sobre el espejo del lago
y permita que su reflejo
pueda beberse de un trago…
De tanto en tanto
caigo hacia arriba
en
una nube
y de tanto en tanto
me besas hacia adentro
es que entre tu y yo amor
la masa no gravita
y la atracción de nuestros
cuerpos
es directamente proporcional
a la infinita distancia que
nos separa
cada
vez que no estás.
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